CUANDO LA PINTURA ENCONTRÓ AL CINE
Lío en el baño
Todos hemos ido a algún guateque o fiesta en alguna casa desconocida. Peter Sellers en 1968 se pasó por una en el Hollywood más hippie interpretando al actor indio Hrundi V. Bakshi. El desconocido invitado por accidente, había sido incluido en una lista por error, se presenta en casa del director del estudio, el general Fred R. Clutterbuck y la lía parda en la cena y posterior fiesta que acaba en remojón grupal en una piscina oculta y el baño de un elefante psicodélico rodeado de pompas de jabón y espuma que estropean las obras de arte del anfitrión.
En medio de tal confusión al desastroso Bakshi, un Pepe Viyuela hindú, le ha dado tiempo a ir al baño donde protagoniza una divertida escena con un retrete atascado, rollo de papel vivo y una pintura decorativa que cae en el mismo estropeándose. Este cuadro moderno pertenece al artista inclasificable Marc Chagall, surrealista, expresionista y cubista a partes iguales que llegado de Bielorrusia conoció la vida parisina y el ambiente cultural que allí se respiraba.
Le cirque bleu, óleo sobre lienzo de 1950 es tan surrealista como El guateque, de Blake Edwards. El artista había sentido de niño fascinación por los acróbatas de los circos itinerantes que visitaban su aldea o los espectáculos circenses que frecuentaba en la capital francesa junto a su amigo Ambroise Vollard donde tomaba apuntes y dibujaba bocetos de todo aquello que veía: Para mí, un circo es un espectáculo de magia que aparece y desaparece como un mundo o un loco y surrealista guateque donde Bakshi salta, escala y hace equilibrismos sobre un tejado cayendo al final en la piscina. Es por ello que el protagonista de esta obra es una acróbata con un aspecto y disfraz diferente ¿un indio en Norteamérica? rodeado de diferentes elementos a cada cual más raruno. En la parte inferior un caballo antropomorfo de color verde y amarillo con mantilla floreada, con una de sus patas agita un gran abanico que suelta notas musicales, una equilibrista maneja unos aros de metal mientras baila en la pista semidesnuda, un pequeño músico de la orquesta que toca un violonchelo y su compañero un acordeón, otro ser humano femenino maneja una trompeta junto a un sol brillante que contiene en su interior una luna musical con violín. Sobre ella y fuera del foco de luz artificial, también de color azul como el fondo, puede distinguirse un pez gigantesco, también antropomorfo con ojo y mano humana que lleva un ramos de flores, una pareja abrazada y una gallina que toca un pequeño tambor desfilando sobre una de las piernas de la trapecista. La música y la danza es una constante en los circos o la fiesta como la que visita Bakshi en esta ocasión. La mujer hipersexualizada con vestido rojo marcando pechos voluptuosos con dibujos de flores y pantalón mini ajustado marcando anatomía es una contorsionista con gran flexibilidad que retuerce y dobla su cuerpo a voluntad como las piernas cruzadas que vemos aquí con pies desnudos. Al igual que el animal coloreado lleva la mujer de pelo largo y suelto con coloretes maquillados en sus mejillas, un abanico que maneja con gran soltura desde las alturas. El juego de volúmenes y tamaños se manifiesta más claramente en miembros como las manos que en ocasiones son desproporcionadamente grandes, como las de la luna o la del enorme pez.
El cuadrito, de 34 x 26 cms, estudio conservado en la Tate Gallery de Londres desde 1953 como regalo del artista, en el cómico film sufre un accidente en el baño al caer desde donde estaba colgado al interior de la cisterna del retrete al contacto con la cabeza de Bakshi perdiendo parte de su pintura al secarse con papel de baño y dejándose descolgada y olvidada al lado de la bañera mientras Bakshi huye por la ventana.
La mujer trapecista es Bakshi, vestido con traje, corbata y calcetines rojos, luego llevará un albornoz del mismo color, en las alturas cayendo del tejado por la noche, símbolo de la luna, a causa del agua desbordada del retrete, hasta la piscina.
En el interior toca una orquesta privada, vestidos con trajes de etiqueta azules, la música. Una gallina el tambor de la batería y humanos el acordeón, el violoncelo, es ahora un contrabajo y el saxofón que sustituye a la trompeta.
El pez que lleva un ramo de flores, con dos colores en la pintura, es el zapato blanco manchado a la llegada y perdido en el pequeño estanque de la casa y tambien Bakshi con la flor amarilla que ofrece a su empapada salvadora, la dulce y simpática Michele Monet.
El caballo verde disfrazado es aquí una cría de elefante que trae la hija del dueño de la casa y que es bañado con agua y jabón lo que provoca que la fiesta se convierta en un circo con los invitados empapados y algunas obras de arte salvadas por Clutterbuck in extremis.
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